We Are X es un documental acerca de salir adelante a pesar de las dificultades, de ver cómo pierdes todo por lo que luchaste y de lo que pasa después con ese mundo que se derrumbó. Por si fuera poco, también tiene Glam, parecido al de Mötley Crüe o Poison, pero japonés.
Antes de la función estelar del día jueves 28 de julio, en el GIFF 2016, había escuchado poco (muy poco) acerca de la banda japonesa X Japan, fue por eso que cuando llegué al Teatro Juárez me sorprendió ver a tantas personas gritando “¡we are x!, ¡we are x!”, y no solamente otakus jóvenes, sino personas de más de treinta años derramando una que otra lágrima por una agrupación originaria del otro lado del mundo. No podía quedarme más con la duda de quiénes eran esos músicos que estaban siendo tan aclamados y, entre la multitud, me colé a la sala para la proyección.
Por medio de un guión cuidadosamente estructurado, crestomatía de la banda y entrevistas a los integrantes y a otras grandes personalidades del Metal como Marilyn Manson y Gene Simmons, We Are X nos platica la historia de la legendaria agrupación nipona de Heavy Metal, compartiéndonos y contagiándonos de todas las emociones que una vida llena de altibajos pueda tener.
Con este documental, el director Stephen Kijak vuelve a lograr retratar el lado que normalmente no vemos de la música y nos hace darnos cuenta que no todo en el rock son “Lennons” y “Cobains”, por lo que se convierte en una pieza indispensable para quienes son seguidores de X Japan, y una agradable sorpresa para los amantes del Heavy Metal y Glam que nunca han escuchado a la agrupación.
Al final, entendemos que los viejos dioses del Rock son exigentes y celosos, sin importar en qué parte del mundo estés, pero por eso lo amamos, porque el Rock no puede ser de otra forma, y porque si lo fuera dejarían de nacer leyendas de poderosas voces, rápidas percusiones y estruendosos acordes.
We are rock. We are Metal. We are X.
