Hoy nos queda agradecerle al Vive Latino su incoherente cartel que contradice los valores y esencia con la que inició el festival. Gracias a esto nos hemos librado de ver en la cabeza del festival a los mismos de siempre: Caifanes/Jaguares, El Tri, Zoé, Cafe Tacvba, Fabulosos Cadillacs, Kinky, Molotov y todos esos que además, se la pasan tocando en los mismos festivales de música en provincia.

¿Por qué esto? ¿hay una crisis de talento en el rock latinoamericano? No lo creo, mejor dicho, los encargados de hacer la selección de bandas son los que tienen una especie de crisis en su cerebro, creatividad, y en su capacidad de adentrarse y de buscar bandas que seguro deben andar por alguna parte de México, Argentina, Chile, Colombia, España o de cualquier parte, rompiéndose la madre en cada escenario y regalando increíbles momentos a sus fans.

Por citar un ejemplo tenemos a los Blenders, unos morros de la CDMX que inclusive, con pocos reflectores ya tocaron en Coachella (Uno de los festivales de música top del mundo) . Si han tenido oportunidad de ir a alguno de sus conciertos, ya deben saber que son un boom de energía impresionante que está conectando con las nuevas audiencias. ¿Por qué no le apuestas a que los Blenders cierren el escenario principal del primer día? ¿arriesgado? No lo creo, tienen un conecte muy fuerte con la CDMX. Digo si hasta PXNDX tocó como cabeza en algún vive, creo que los Blenders hoy sin pedos, podrían hacerse cargo de hacer una completa fiesta el escenario principal.

En fin, hoy el Vive Latino, se convirtió en una mutación rara del Corona Capital, un vive latino que con su audiencia exigente en su segmentando gusto, correrá el riesgo de abuchear actos como los de Gorillaz, ó Morrissey o cualquier internacional, porque ellos solo quieren ver a Molotov y cantar la rola de «puto» porque a eso se han acostumbrado durante años, esperemos que no suceda, esperemos que todo esto de los abucheos solo quede en anécdotas de años pasados en presentaciones de bandas internacionales.

El vive pierde en esencia en el mood de querer ganar nuevos fans y nosotros ganamos como audiencia, mientras más música nos den, mejor, sea internacional o no. No hay duda, la esencia del festival progresivamente se ha ido desvaneciendo seguramente por intereses económicos, ojalá que alguien tome las riendas que deja esta edición del vive que a simple vista parece un concierto de Gorillaz en el que le abren otras 70 bandas.

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