Sorprenden las calles atestadas de turistas jóvenes y bien revolcados por la multitud que invade toda la ciudad. Nos toca disfrutar de las fiestas católicas, ¡ya qué diablos! al parecer es lo único bueno que nos ha dejado eso de la religión. Con todo y tráfico de transeúntes recibimos el #juevesemergente del día de las flores.
En ésta ocasión especial, el escenario de la terraza se volvió el lugar adecuado para encaminarnos al placer musical, y en mi humilde opinión, no pudimos haber pedido mejor inicio que comenzar a rompernos el coco de la mano de Narvol, dueto guanajuatense que nos alentó a lanzar un par de aullidos a lo largo de la noche.
Un inconveniente relacionado al transporte, causó el desplazamiento de la banda sonora que seguía en el itinerario, para suerte de la audiencia, que poco a poco se empezaba a amontonar en las mesas, la banda Salamantina, Futuro, estaba lista para intervenir el ambiente y romper el silencio con su rock alternativo y psicodélico.
En la última pero no menos importante presentación del escenario Antik, tenemos a los chicos de León, que han llegado para quedarse, Undercity Men. El cuarteto leondinense vino a cachetearnos con su garaje punk y algo de irreverencia local, que inyectaron en la gente un frenesí tan prendido que sólo pudo sobrellevarse con los estallidos de Monoceronte frente a la consola.
En la parte de abajo, ya entre cuatro paredes, Monoceronte fue quien tomó la batuta el resto de la noche y nos regaló un play list tranquilo y delicadamente colocó la cereza del pastel.
Así despedimos la noche, un poco subida tono, un poco increíble y un poco de todo. Nos vemos en el siguiente jueves emergente.
Por Edgard Paredes.
Forografía: Edgard Paredes y Armando Castillo.
Narvol:
Futuro:
Undercity men:
Monoceronte:
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