Este fin de semana nuestra aventura musical la tuvimos en casa; el Pub de la Diagonal en uno de los foros más versatiles de la ciudad y con una banda que se ha ganado a pulso el reconocimiento local y por supuesto también en los estados en donde se ha presentado, si eres Salmantino el nombre Nadie Calavera seguro que te un hace eco ligado a algún recuerdo de aquellas tocadas en donde era más sencillo sacar esa bestialidad inherente, algo tendrá que ver con los años supongo pero yo le atribuyó más aún a ese sentimiento en común que era fácil de percibir en aquel entonces, esa bestialidad adolescente que nos contagiábamos unos a otros y que se sentía casi palpable en estas tocadas que se armaban en alguna bodega mal iluminada, en donde uno podía dejar de pertenecer con todo el escándalo posible. Será algún momento cúspide de cada generación lo que ligo a este sentimiento pero como cada una de ellas le atribuye (y lo seguirán haciendo) ese que vivimos nosotros fue mágico.
Kidmind.
Me da gusto ser testigo de esa retroalimentación que se da entre las bandas más experimentadas y aquellas que apenas van emergiendo, es un largo camino lleno de obstáculos, desilusiones y muchísima chinga y si alguien sabe de esto son justo esas bandas con un reconocimiento ya establecido que como ellos también empezaron a componer en algún cuarto anónimo de la ciudad con lo que tenían a la mano. Los chicos de Nadie Calavera le dieron la oportunidad a Kidmind de abrir su gira por qué al igual que nosotros que los cubrimos en cada posibilidad que se nos presenta ellos vieron todo ese potencial que tienen, y como buenos paisanos que somos queremos ayudarlos a que crezcan todo lo posible para que pongan en alto el nombre de la cuidad. Dejemos atrás todo lo que hemos mencionado en otras reseñas, el punk-rock/garage/stoner en el que saben orbitar y que han ido puliendo con cada tocada, ellos traen todo el carisma musical (por decirlo de alguna manera) para contagiar de energía a cualquier audiencia con sus creaciones o con los covers que eligen interpretar, no les estoy mintiendo, es sencillo volverse un seguidor aunque el género no sea de una usual preferencia y la razón es muy sencilla; lo hacen bien y tienen una tremenda disposición por ir mejorando cada vez más. La próxima vez que lean su nombre en algún cartel de los alrededores no pierdan la oportunidad de experimentarlos por ustedes mismos y decidir si esto que escribo es cierto o no.
Nadie Calavera.
Fue un proceso bien entretenido ir redescubriendo mi transición personal mientras tocaba Nadie Calavera; la evocación de lugares, emociones y gente que parecía tan distante ahora se acercaba alarmantemente entre guitarrazos y sonidos de trombón y saxofón, esa época adquiría nuevos e interesantes colores, era tan hermosa toda esa destrucción alimentada con un propósito que ya olvidamos (o pretendemos que lo hicimos) junto aquellas madrugadas interminables que como decía en la introducción eran simplemente mágicas. Verme allí viéndolos a ellos y sentir que el viaje valió la pena con todo y sus horribles descensos, mientras brincaba de un lado a otro con los ojos cerrados y le daba grandes sorbos a esa corona fría sintiéndome parte de un tributo que me gusta pensar que fue implícito para todos aquellos que sobrevivimos a aquellos días y que compartíamos ese gusto por seguir estando, junto o detrás del escenario era lo de menos. Nadie Calavera es una banda orgullosamente salmantina de ska-punk que ha podido moverse por toda la república después de trabajar muy duro, creo que poseen un impulso transgresor y un amor incondicional por lo excesivo que les dio fuerzas para ser la banda que son ahora, y se mantienen en esa línea, eso aunado a fuerte sentido de hermandad entre ellos y sus seguidores hace que sea una banda con la que es fácil encariñarse, justo ahora se encuentran en gira con su nuevo material titulado ‘nadie es más que nadie’ (abajo les dejo el link en spotify) y que tanto musicalmente como en la letra de sus canciones es un homenaje nítido y detallado de todo esto que les escribía arriba: el pasado, los amigos, los vicios, crecer con las circunstancias de la vida y encontrar las fuerzas para mantenerse en pie dentro de ésta. Mañana jueves estarán en el Bar Fly en la cuidad de Guanajuato si andan por allá no falten para que evoquen las glorias y las penas de aquellos años y a la par disfruten la gran evolución musical que han tenido en estos años los integrantes de Nadie Calavera y de paso redescubran la suya mientras se dejan poseer por las melodías.
Texto y fotografía por Armando Castillo
