Ya estoy harto de todo lo que me haces sentir y todo lo que no me haces. Estoy harto de este juego, ya estoy harto, no puedo más, ya me cansé de buscar tu amor y recuperarlo mientras te vas a los brazos de otro. Ya me cansé de ver como hacen todos su dinámica pendeja de darse el paquete. ¿Para qué me quieres probar? ¿Qué buscas medir? ¿Por qué siempre darse el paquete para probar el umbral de alguien?
Chinguen a su puta madre todas ustedes. Y sí, todos los hombres también (por aquello que digan que los voy a discriminar). Yo no tengo que probarle nada a nadie. No es mi obligación, no lo siento, no es ni será nunca mi deber y menos bajo condiciones tan pendejas sólo para probar si soy un buen hombre o apto para coger y preñarlas cual ganado que somos todos. Que chinguen todos por igual a su puta madre, y me vale verga que vayan incluidos aquellos cercanos que me quieren y velan por mí.
Tan patéticos se ven procurándome que a veces pienso que la gente me ve más como un animal que como un hombre. Pues mas animal he sido toda mi vida, así que, ¿acaso hice algo aparte de existir que les incomodara tanto que quiera regresar a ser un animal?
Entonces por un día, por un mes, por un tiempo, por siempre, te voy a pedir que por favor te olvides de esas ocasiones en que estábamos destinados a encontrarnos.
Olvídate de esas caricias que me hicieron feliz, aunque yo no te lo haya demostrado como tu querías. Olvídate de las veces en que me quise devorar tus labios, olvídate de los abrazos y los flirteos que tuvimos alguna vez, aunque a veces los buscaba. Olvídate de este juego que ya me cansó y lo único que necesito para salirme de esta pinche tangente es que te entregues a los brazos de otro. Olvídate de aquellos desenfrenos donde nos perdimos uno dentro del otro y donde dimos rienda suelta a nuestros instintos, a lo único que todavía me hace ser humano, pues consciente estoy de que si pierdo todos los sentimientos por ti… regresaré a las viejas costumbres. A intentar ser asesinado, a buscar la muerte en una pelea, buscando un refugio celestial en las drogas químicas para ver a que hora mi corazón se destruye a ritmo metanfetanímico. Y si queda algo después de darse en la madre, que sea solo vil polvo.
Viviendo en automático, como quien dice.
Te pido que te entregues a él para que yo pueda convertirme en un poeta, en aquel que todos odian y sobre todos he de dejar caer mi aborrecer sobre el amor, pues la realidad es que mi alma ya no puede seguir con tus juegos de escarnio; ¿pues quién soy yo para seguir amándote y tú en cambio te sigues entregando a sus brazos?
Entrégate y desata la rabia. Rabia de años, rabia de querer matar para estar encerrado. Para ya no volver atrás y pedir ser rescatado por a veces un sentimiento infertil, lleno de promesas y esperanzas iguales o más vacíos que las religiones.
Entrégate a él, anda. Que yo volveré al olvido, a ese olvido amoroso del cual solo viviré en tu mente… y después desaparecer del cosmo poco a poco en cada beso que le propinas.
El amor es una falacia tremendamente orquestada…
Simplemente nada será igual sin ti…
Por Exmortem