Como preámbulo hay que ser concretos y honestos en que aunque Tom Holland es un actor versátil y carismático, dista en realidad de lo que actoralmente es y que está lejos de ser un joven arácnido memorable, eso ya quedó demostrado en la entrega anterior, queda por sentado que es más de carácter accesorio para el MCU que el Spiderman que se merece el cine.
Esta entrega tiene una cantidad de momentos de apego pero a Iron Man, una parte considerable del primer acto nos recuerda el gran hombre y el gran sacrificio de Tony Stark, y si es el mentor de este Spidey pero suficiente carga emotiva tuvo el hombre de hierro en “end game”. Hay secuencias que en realidad no aportan nada a la historia y ahí se pierde la mitad de la cinta en un vaivén de momentos y situaciones de típica película adolescente, en algún momento vemos a un Peter que llega ser hasta torpe para toda la experiencia que a adquirido desde la primera vez que se puso el traje del amigable amigo y vecino, los eventos de Avengers tampoco no le aportan nada de madurez al personaje, siendo justos las mejores actuaciones son de Jon Favreu(Happy) y Marisa Tomei(Tía May), aquí se puede decir que quedó demostrado la falta de calidad actoral de Zendaya que siempre es mediana o gris en sus aportaciones desde “homecoming”, Jake Gynehall no es brillante por que la historia no se presta, pero tiene un monólogo con mucho ritmo donde nos presenta esta otra historia o subtrama que bien se pudo explotar más como en otras cintas de este universo compartido. Desafortunadamente este argumento ya lo vimos en “Iron Man 3” “Homecoming” y eso que Marvel studios llama civil war.
El trabajo técnico que es de realidad está a la altura pero todo el CGI se ve estilo Superman en JL, siendo objetivos el que está película sea la culminación de la fase 4 del MCU, queda a deber en varios aspectos mayormente argumentales una versión muy teenager de Spiderman que para los que crecieron viéndolo en los 90’s les parecerá deslucido, lo más rescatable es el giro después del final, que no la hace una película trascendente para el universo compartido.
