Dividiendo la noche en un punto sin retorno a son del refinado sample, «Hola Soledad» de Rolando La`Serie. Inauguran la primera ocasión que tengo el honor de contemplar, la cátedra bélica en el vocabulario guerrillero de Monklicks.
Atención, pasaron por aquí los primates erectus, voceando su rap casero bien secundado de calculadora beats, en la tornamesa de D.J. Chico. Con el único propósito de despertar a los muertos, sepultados en el subsuelo de un escenario del que nadie habla. Sin embargo, los zombis existen vagando en el rap mexicano y en los suburbios de León, Gto. Con ellos comprobé la distancia sensitiva de un público deprimido, hasta pasar al otro extremo y sobrecargar el cambio escalonado en el registro de género en género. Pues a esto me refiero cuando me dirijo con énfasis a la segunda propuesta de la velada. Ya que movió un punto importante en el chip de toda la cuadrilla inquieta de aquel lugar. Parecía que la audiencia vibraba por aguantarse las ganas de explotar, hasta que llegó la ortodoxa combinación de Control Machete y Beastie Boys. Cuando entonces, a plena rola y por accidente, resurgió el ritual neoyorkino del “Pass the Mic”. Arrebatando protagonismo a la lengua latina y aprovechando el fuego a través de las palabras que salían de los Monklika. Lo que sirvió para prender la mecha y revivir los manotazos al aire, apelando a la respuesta acostumbrada para un buen rap.
Todo paso en la velada del viernes 23 de agosto en el evento llamado ¡SURFEA! ¡RAPEA! O ¡MUERE! Del bar Tesstarosa. Con la presentación de los grupos Diván Alternativo, Monklicks y Los Primitivos Surf.
Parece que la gente es medio rara, pero a todos nos gusta lo fino y que puede ser mejor, que liquidar la media noche con las distinguidas aptitudes de invención en Los Primitivos Surf. Exponiendo la mezcla más jugosa de géneros musicales de hoy en día. Aunque el surf está implícito en el título de su nombre, no se pierden el antojo de saborear diversos estilos. Maniobrando entre el ska, rock, garage, indie, para terminar con el sonido amazónico. Permitiéndoles gran apertura de criterio, pero sobre todo, impregnando su personalidad surfera que los caracteriza.
Al final salí del hoyo funky y me dediqué a brindar por lo que resta de mi vida.
Salud.
TEXTO: Luis Edgar Paredes.
Twitter:@EdiManson1
FOTO: Marcos Martínez.