Son las 12:40 y vamos caminando sobre el Parque Ecológico de Puebla, el espacio que recibió en esta ocasión la cuarta edición del Festival Catrina y el cual nos abrió las puertas bajo el intenso y disfrutable calor poblano. Así fue como arrancamos la maratónica sesión de música en vivo, en la búsqueda de ese pacto adictivo y liberador que de paso sirve de alimento para el alma de los que amamos la música sobre todas las cosas. Lo mejor es que no vamos solos, miles de personas también nos acompañan, algunos de aquí, otros de allá, otros de más lejos, todos vamos apresurados, emocionados y ansiosos, y no, no estamos drogados. Simplemente pareciera que no queremos perdernos ni un segundo del fest más importante de Puebla. Boomers, Generación X, Millennials, Generación “Z”, todos bajo un mismo objetivo: Vivir un día increíble y disfrutar de la música de nuestros artistas favoritos, porque más allá de todo, solo queremos desconectar el cerebro por unas horas de la brutal realidad que a veces nos azota en diferentes vertientes de la vida y cuando un festival logra esto, tiene la misión completa ¿y saben qué? spoiler alert: El Catrina 2019 lo logró.
LA EXPERIENCIA CATRINA.
Arrancamos el día con algo de nostalgia y tristiscidad con los acordes y letras de Mi Sobrino Memo, quien se notaba súper feliz por el recibimiento que le dieron sus fans en el “escenario Indio” y la verdad que gusto que así sucediera, ya que este es uno de los proyectos que también vienen empujando desde hace rato en la escena emergente nacional, hoy el momento le ha llegado a este artista mexicano que le apuesta a la ondita sad acompañado por su guitarra y algunos arreglos que lo llevan a coquetear por los terrenos del indie pop. Un artista honesto que esperamos siga en ascenso.
Después caminamos un poco por el festival, que lucía con una logística certera que le facilitaba la experiencia a los asistentes, así entre la gente que cada vez era más, nos movimos al escenario Catrina, donde también se iban a dar cita los talentos internacionales de mayor renombre como Flaming Lips o Mac Demarco, pero bueno, eso sería más tarde, por ahora nos tocaría reencontrarnos con Los Blenders y Señor Kino, bandas que también en los últimos años han levantado la escena del rock surf desde distintas latitudes del país, así el Catrina los recibió en su escenario para regalarle la primera dosis de locura y descontrol a los asistentes, guitarras desenfadadas, baterías rápidas que incitan al baile y a no dejar de saltar llevaban la pauta, las letras eran sinceras y nos hacían un llamado a llevar el “Ponte Punk” como un estilo de vida que nunca pasará de moda.
Señor Kino también fueron unos dignos representantes de la nueva ola del rock sonorense, y los encargados de llevar los primeros toques de estridencia a la juventud sedienta de más y más explosiones mentales a través de la música, así fue como entonces Señor Kino cumplió su trabajo.
En otro punto del festival que tiene sonidos para el gusto de todos, logramos encontrarnos con actos nacionales e internacional como Silvana Estrada, Los Mesoneros MUERDO, Gran Sur, Emmanuel Horvilleur, Ruido Rosa, Tomasa del Real, Enjambre, cada actuación alzando la voz por el talento de américa latina y nos quedó muy claro, hay demasiado talento.
Conforme avanzaba la tarde artistas con una carrera consolidada empezaban a presentarse convocando grandes masas a través de sus mayores éxitos, en ese momento logramos encontrarnos en actos de bandas legendarias de la música en español como Los Tres y Aterciopelados. La tarde noche llegaba y abría la pista para disfrutar de actos pop como Moderatto, Ed Maverick, Kabah, Rey Pila y hasta el Grupo Cañaveral que nos dejó la pista bien caliente de tanto zapatear como si estuviéramos en la mejor boda del año.
Llegó la recta final del festival, venía lo mejor, esa mezcla de sonidos que congregaría a miles en el parque puebla, así fue que llegó el momento de escuchar al canadiense Mac DeMarco, que nos llevó por un trip interminable lleno de buena vibra y de una actitud que consagra la grandeza del artista que se ha convertido en la voz más ácida de una generación. Y ahí estábamos, bailando, disfrutando cada detalle de sus arreglos musicales, él nos ordenaba y nosotros lo obedecíamos como zombies que queríamos más y más canciones. Mac deja en claro porque es uno de los artistas más relevantes en la escena alternativa internacional. Esto solo fue el calentamiento para llegar a una explosión que terminaría por apoderarse de nuestros oídos y de nuestra cabeza. Después de 4 años, los Flaming Lips regresaron a México para darnos una oleada de emociones por poco más de una hora, en la que hit tras hit dieron cátedra y dejaron claro porque son una de las bandas más importantes que tenemos en la actualidad. Finalmente el festival abrió sus escenarios principales para recibir a Deorro y a Cartel de Santa.
El cierre del fesstival fue dandose entre rimas y música electrónica fue el punto exacto para despedir en este 2019 el año de festivales. Gracias Catrina por regalarnos el mejor cierre de año festivalero, con mucha música, amigos y momentos que seguramente se quedarán en la historia como uno de los mejores eventos que han existido en Puebla. Así, solo nos resta decir: Larga Vida al Catrina.
Fotografías por: @helloisandrew https://www.instagram.com/helloisandrew/
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