El inicio de este álbum como usualmente sucede suele darse por omisión y más bien hay que descubrirlo al ras de la música, pero en éste que reseñaremos se nos va contextualizando a mano de una pequeña prosa: 

Nos tapó la boca para que no contradijéramos, sus actos nos dejó los ojos abiertos para que contempláramos el caos que nosotros habíamos causado, nos devolvió al inicio, nos devolvió al año cero’.

V Enki es una banda oaxaqueña, cuyas creaciones se ubican dentro del género de la progresión, y este álbum ‘año cero’ es el primer LP completo que sacan a la luz, uno en donde desde la primera canción nos hacen saber de todas las posibilidades que existen dentro de estos acordes, el adjetivo ‘explosivo’ se queda corto, y aunque se nos conduce velozmente dándole una rápida introducción a cada uno de los instrumentos, la verdadera protagonista es esa cohesión que va conectando cada faceta de esta canción y del álbum a continuación, y bueno, por supuesto la versatilidad de sus músicos que están detrás de ésta.

Después de arrancar con ‘Felinos’ que sirve como intro, continuamos con el recorrido que empieza lento para pronunciar ese contraste a dónde nos lleva cada una de las canciones, uno que qué se va desarrollando siempre con diferentes matices pero sin dejar de ir paralelo a la voz y la letra y sin omitir ese desenlace que se aleja bastante de lo que fue en un principio, con algún entremés instrumental que no ofrece descanso hasta concluir en ese anticipado frenesí que seguramente van disfrutar.

Éste es un álbum que nos muestra un vistazo de cómo está avanzando el under del sur (más específicamente el de Oaxaca), que seguramente también debe estar bien nutrido dentro de sus círculos como siempre pasa con la música emergente; ‘Año cero’ es una muestra de la versatilidad que puede adoptar una banda para intencionalmente saltar entre géneros, y sobre todo darle una coherencia que los distinga; yendo del un marcado metal al melódico, o al progresivo, pero sin dejar de alimentar esa aura que la letra y la modulación de la voz termina de definir, llevado un paso más lejos a V Enki de sólo la creación sino también a la pasión por interpretarla y otorgarle una historia de la que se alimente para que sea más sencillo sentir a ésta banda. Les compartimos entonces a esta propuesta con el afán de reseñar talento de por allá para romper esa barrera imaginaria, e ir conociendo a todos esos percusores de la nueva ola de talento mexicano que irá marcando la pauta.

Por Armando Castillo

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