Por Missael Delgado
Coincidiendo con los veinte años como banda y diez años de su primera visita a León, los argentinos Él Mató a un Policía Motorizado llegaron a nuestra ciudad presentando su nuevo disco “Súper terror”. Su gira, llamada igual que el disco, pasó por Monterrey, Puebla, Cdmx, Guadalajara, Toluca y Querétaro.
Foro Paruno recibió a más de doscientos asistentes que desde temprano hicieron fila para poder tener un lugar privilegiado y ver de cerca a Santiago Barrionuevo, vocalista y líder de la banda. Previamente, se había anunciado la participación como telonero de Florián, hijo del mítico vocalista de Los Fabulosos Cadillacs, Vicentico. Después, se confirmó que no sería parte del evento.
La diferencia entre aquella primera visita en el lejano 2013 y esta última es abismal. La banda se consolidó con uno de los shows en vivo más potentes de la música argentina. Con sold outs en su país y en otras partes del mundo, Él mató es ahora referente y headliner en muchos festivales desde hace varios años.
Cerca de las diez de la noche, Santi Motorizado y compañía saltaron al escenario, a la par que los asistentes gritaban de emoción, pues la espera había sido larga. “El Magnetismo” fue la canción de apertura, y entre las distorsiones de la guitarra y el acompañamiento melódico del tecladista Chatrán Chatrán, los temas danzaron y electrizaron a los eufóricos asistentes.
La variación entre los temas nuevos y los clásicos fueron creando una atmósfera de energética melancolía. Sonaron “Tantas cosas buenas”, “Más o menos bien”, “Medalla de oro” y “Destrucción” una tras otra, sin permitir respirar a los fans.
Después de diez canciones, el momento más esperado de la noche llegó al escuchar el inconfundible inicio de “El tesoro”, una de las canciones más solicitadas por la gente que disfruta de los argentinos. Poco después, se tomaron una pausa de minutos fuera del escenario, para volver y concluir con una de las presentaciones más potentes de este año en la ciudad.
“Chica de oro” dio fin a un concierto inolvidable, y poco antes de retirarse del escenario, Santi se acercó para firmar algunos discos que alcanzaron a entregarle los asistentes más próximos al escenario.
En diálogo con Doctora Muerte, baterista de la banda, nos platicó que estaban muy contentos de haber venido no solo a nuestra ciudad, sino a México, un país que siempre les recibe bien. Se mostró emocionado al ver la respuesta que tuvo el nuevo disco, que tardó aproximadamente seis años después de su último material, “La Síntesis O’Konnor”. Agradeció mucho la recepción que tuvo el público leonés y prometió que la banda volvería pronto.