Te presentamos cómo vivimos el Festival L4tido desde 3 ángulos diferentes.

1.-

Este es el primer festival que me ha tocado experimentar desde dos perspectivas diferentes; como prensa y como espectador, había que concentrarse para ponerse serio cuando el trabajo lo ameritaba o dejarse enloquecer cuando se salía de la carpa, tal vez piensen que esto es sencillo pero para mí las transiciones las tengo que ir asimilando con lentitud aún así creo que cumplí casi a la a perfección con mis dos tareas; con el caperuzo y la de perderme dentro de la música, dentro de mí mismo. Lidié con todo esto bajo los efectos de un aturdimiento artificial que llenaba de lucidez mi percepción de todo el lugar, hermosísimo, voltear al horizonte y ver lo cerros con la música detrás aumentaba la experiencia; la locación era perfecta para encontrar esa conciliación, es muy diferente sentirse rodeado de edificios en la urbe en los festivales de las grandes ciudades a estar en ‘las alturas’ viendo como el paisaje va mutando junto la música y la euforia colectiva, y aunque esta vez me tocó escuchar las presentaciones de lejos no le quitó ni un poco de peso a la vivencia, en todo momento noté una camaradería implícita, con todos, desde los mismos artistas con los que me tocó platicar un poco hasta la gente extraña que te sonreía mientras bailaba y saltaba dejándolo todo frente al escenario. En cuestión de logística creo que no puede haber quejas, todo estuvo muy bien coordinado, desde el trago hasta el audio y la selección de artistas mantuvo bien la progresión de energías, al final todo mundo estaba éxtasis, como en pocos conciertos he visto eso demuestra que no se necesita músicos anglosajones para poner el ambiente, con este puñado de artistas latinos fue más que suficiente para alcanzar una noche inolvidable y todos esperamos que se repita el año siguiente, más grande, dos dias quizá, ya se me antoja estar de nuevo con el sentimiento engrandecido entre cerros mientras tengo un soundtrack repleto de matices haciendo eco entre sus barrancos.

Armando Castillo

2.-

El Festival L4tido fue una experiencia gratísima para los que estuvimos presentes. Las presentaciones en vivo, excelentes; buen audio y una ubicación muy cómoda de escenarios y áreas, como la de comida y talleres. Hasta el clima tuvo piedad al no estar tan soleado en la tarde.

 

Las bandas estuvieron complacientes con su público, quien desde el mediodía comenzó a hacerse presente en el Parque Guanajuato Bicentenario. De hecho, fue fácil ver a los músicos compartir abajo del escenario con los asistentes y corear a las grupos amigos, a las propuestas admiradas o pasar un buen rato con sus fans.

 

Destacable fue la propuesta en el domo de música electrónica, en donde se concentró la fiesta ya entrada la madrugada. A esa hora nos hacía falta echar un buen taco, y creo que en ese aspecto pecó el Festival de corto en sus propuestas.

 

Ya era hora que esta experiencia de masivo se diera en el Bajío. Ojalá se repita el próximo año y que Latido crezca para la siguiente edición, que ya esperamos.

3.-

El festival l4tido fue una grata sorpresa en general, no tengo una gran experiencia en festivales, pero el sentirte cómodo en el lugar, la buena vibra de la gente, el sonido sin broncas, las bandas completas y rifándosela increíble, son detalles que de verdad se agradecen, sabemos que detrás de esto siempre hay mucha gente partiéndose la vida durante varios meses para que los asistentes al festival nos llevemos esa grata experiencia y nos den ganas de regresar el próximo año. Este fue el caso de L4tido, una primera edición que en realidad por la forma en que fluyeron las cosas, parecía una cuarta o quinta edición. Ver el atardecer en cualquier festival mientras escucho alguna de mis bandas favoritas, es de mis mejores momentos en los festivales, y esta vez en el Parque Bicentenario fue muy acogedor, fue distinto… me gustó porque era nuestro festival hecho en casa, en Guanajuato, algo bien hecho y a la altura de cualquier otro festo de cualquier parte del país. Felicidades L4tido, ya queremos sentirte el próximo año.

M. Paguers.

 

FOTOS:

Pedro Herrera

Armando Castillo

Comentario

Comentarios